GESTION AMIGABLE DE LA SALUD: G. A. S. Blog´s

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Archivo de nuevas enfermedades

Demasiadas enfermedades y no tantos enfermos

En los países industrializados vivimos en una sociedad con los mejores indicadores de salud de la historia pero que paradójicamente está cada vez más preocupada por su salud, que cree que la medicina tiene respuesta para todo y que es dependiente de los servicios sanitarios. Los problemas socioculturales como el paro, la soledad, la infelicidad, el sedentarismo se están convirtiendo en enfermedades. El embarazo, el parto, la menstruación, la menopausia o la vejez han pasado de ser etapas de la vida a ser considerados problemas médicos. Van disminuyendo las formas no médicas de afrontar las dificultades. Se está clasificando como enfermos/as a personas sanas por el hecho de poseer algún factor de riesgo lo que hace que una gran parte de la población esté recibiendo tratamientos preventivos de por vida.

En este proceso de medicalización intervienen varios agentes. Por un lado la industria farmacéutica: la población realmente enferma es una minoría y por lo tanto, haciendo creer a los sanos que no lo están el mercado se amplía sustancialmente. Cada vez que aparece una nueva enfermedad también viene acompañada de una fántastica novedad terapéutica de elevado precio capaz de resolverla. Por otro lado los medios de comunicación participan difundiendo la imagen de una medicina omnipotente que utiliza técnicas y fármacos de última generación capaces de solucionar todos los problemas. Los responsables políticos y las administraciones sanitarias también contribuyen autorizando tecnologías y tratamientos innovadores sin evaluar la necesidad y utilidad de los mismos y los posibles riesgos asociados. Por otra parte los médicos jugamos un papel fundamental en este proceso aceptando de buen grado la definición de nuevas enfermedades por distintos motivos: en ocasiones porque estamos formados para curar y no sabemos abordar los problemas desde una óptica diferente a la patología, otras veces porque pensamos que la definición de nuevas enfermedades puede ser beneficioso para nuestros pacientes (esos a los que teníamos pendientes de catalogar y no sabíamos cómo)y en algunos casos se debe al deseo de una superespecializacion o de aumentar la capacidad de influencia.
Finalmente la población acepta el mensaje que envían los anteriores de que la medicina tiene la solución para casi todo. Como señala Margarita López Carrillo en su artículo La medicalización de la vida y la Salud de las Mujeres los pacientes contribuimos a sostener la medicalización porque pensamos que el médico sabe más de nosotros que nosotros mismos y le trasladamos la responsabilidad que tenemos sobre nuestra salud (aunque afortunadamente parece que esto está cambiando). Además inmersos en la sociedad de consumo tendemos a comprar soluciones a los problemas en forma de fármacos.

Como plantean los autores del artículo: Yo medicalizo, tú medicalizas, el,… reflexiones y propuestas, los profesionales sanitarios deberíamos tener la capacidad de devolver la autonomía a los pacientes mediante una relación asistencial que comparta con ellos la información y las decisiones y que los considere como protagonistas del proceso. Las personas bien informadas deben hacerse responsables de lo que les sucede y tomar conciencia de que la solución puede depender más de ellos sus circunstancias y su entorno que del sistema sanitario .

Las autoridades sanitarias por su parte deberían actuar de forma responsable en el proceso de autorización y financiación de fármacos, en la información que se transmite a la sociedad y en la gestión de los recursos.

Estaría bien formar parte de una sociedad madura que acepte que la juventud, el amor, la felicidad o la belleza no son eternos y en la que las personas dispongamos de recursos para abordar las dificultades de la vida sin caer en la frustración.

Y para leer más:>Medicalizacion de la vida e invención de enfermedades por la industria farmaceutica